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Dicho y hecho. Este lunes, la Municipalidad de Santiago interpuso una demanda civil en contra de los padres de cinco estudiantes del Liceo 7 Bicentenario Teresa Prats (todas integrantes del Centro de Alumnas), por la toma del establecimiento el mes pasado.
La ocupación se llevó a cabo entre el 15 y el 17 de mayo y entre el 19 y el 24 del mismo mes; y durante esos nuevos días las escolares –aseguran en el municipio- provocaron daños en la infraestructura y en el mobiliario avaluados en $3.300.000.
'Ellas (las alumnas) infringieron un deber de cuidado como centro de alumnos (...), que no puede llamar a realizar un acto que tenga una connotación delictual como es una toma. Recordemos que el 2014 la Corte Suprema cambió el paradigma de las tomas y estableció que toda toma es una acto de fuerza ilegal', explicó Christopher Gotschlich, jefe del Departamento Jurídico de la Dirección de Educación Municipal. La ocupación constituye un delito de 'usurpación de propiedad', agregó el abogado.
Con esta acción judicial, el Municipio persigue concretar la política del 'rompe-paga' impulsada por la administración del alcalde Felipe Alessandri. Dicho programa se ampara en la Ley General de Educación, el Reglamento sobre Consejos Escolares y el dictamen de la Corte Suprema del 2014 que determinó que las tomas son ilegales.
Para hacer efectivo el pago, el municipio está invocando el artículo 2.320 del Código Civil (ver recuadro) en el que queda estipulada la responsabilidad de los padres por los hechos cometidos por sus hijos.
El padre de familia
Para el abogado y profesor de la Clínica Jurídica de la Universidad Católica Claudio Valdivia, 'la responsabilidad de los padres hacia los hijos- según el Código Civil- es bastante directa'. Y explica por qué: 'El Código Civil en distintas normas utiliza un concepto que es el padre de familia , y bajo ese mismo término la ley supone que un buen padre de familia, por la autoridad y cuidado que se le confiere respecto de sus hijos menores de edad, debiera estar al tanto sobre dónde se encuentra su hijo y por lo tanto es responsable de los daños que pudiera ocasionar', asegura. En este sentido, la única alternativa del apoderado para no pagar es no poseer bienes, asegura Valdivia.
Su colega Gabriel Hernández, profesor de Derecho Civil de la Universidad de Chile, discrepa y opina que la norma no es tan concluyente y que los padres podrían eludir el pago de los destrozos si demuestran que no fueron negligentes en el cuidado de sus hijos.
Un caso claro -dice- es cuando el menor no vive con ellos, 'se fue a vivir con unos amigos, por ejemplo. Ahí los progenitores podrían acreditar que no tuvieron culpabilidad y exonerarse de responsabilidad'. O si logran comprobar que pese a las advertencias y oposición de los padres, el menor igualmente participó en la toma, concluye.
Alumnos del INBA siguen en toma, pero se juramentaron no romper nada
Desde el pasado jueves un grupo de alumnos del Internado Nacional Barros Arana (INBA) tiene tomado el colegio. Han sido desalojados en dos oportunidades, sin embargo, insisten en que sus demandas ameritan la ocupación. Entre su petitorio, exigen mejoras en los baños, en la canchas de fútbol, cambios en el menú del almuerzo y educación no sexista.
No obstante, a diferencia de lo que ocurrió el año pasado, cuando el liceo registró pérdidas millonarias por los destrozos ocasionados durante la ocupación, en esta oportunidad dicen que quieren llevar a cabo una toma ejemplar. 'No podemos destrozar algo por lo que reclamamos'.
Luis Hume, vicepresidente del Centro de Alumnos, cuenta que desde el fin de semana, junto con algunos apoderados, se han esforzado en limpiar los rayados vigentes de otras movilizaciones y en pintar el liceo. Además, cuentan con una comisión de seguridad -integrada por los mismos alumnos- que se encarga de vigilar que los escolares que ingresan al colegio no lo hagan con plumones ni artículos cortopunzantes. También, durante la jornada, los mismos jóvenes de cuarto medio se encargan de impartir clases de matemáticas, química y biología a los más pequeños. 'Nos sirve para repasar para la PSU', dice el alumno Felipe Toloso.
