Diario Pulso
El abogado y docente de la UC que defendió al Gobierno en el TC resta relevancia al fallo que afectó a la titularidad sindical sobre los dictámenes que emita la DT. "Si hay una mejor negociación colectiva, no debería haber riesgos (de judicialización)", añade.
Ruido ha generado en el mercado que el futuro de la Reforma Laboral haya quedado en manos de los tribunales. Esto, luego de que el Gobierno decidiera vetar el proyecto y promulgarlo con los vacíos legales que quedó tras el fallo del Tribunal Constitucional (TC) que impugnó la titularidad sindical. Dicho riesgo también se vio acrecentado luego que el TC -en el trámite de control obligatorio preventivo- declarara inconstitucional y suprimiera del texto del proyecto la palabra 'sindicatos' en el procedimiento judicial de reclamación por calificación de 'empresas estratégicas' sin derecho a huelga.
En ese contexto, uno de los principales focos de litigiosidad que prevén los privados es la situación de los grupos negociadores, entidad que quedó desregulada en la nueva legislación, ya que no se hace referencia a los mecanismos necesarios para que lleve adelante una negociación colectiva, como sí lo hace para los sindicatos. También se anticipan conflictos en los dos pactos de adaptabilidad que quedaron con titularidad sindical.
El fantasma de la judicialización volvió a aparecer la semana pasada tras la ceremonia de promulgación de la Reforma Laboral en el palacio de La Moneda. Desde el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Alberto Salas, hasta el timonel del Partido Comunista (PC), Guillermo Teillier, reconocieron que en el futuro se tendrá que discutir un proyecto de ley adecuatorio para hacerse cargo de los vacíos de la nueva legislación.
'La ley quedó con ciertos vacíos que quisiéramos poder mejorar. Hay espacio para que haya judicialización y sería bueno construir en un acuerdo colectivo una ley que permita llenar esos vacíos', señaló Salas.
'Es evidente que siendo un avance la reforma, en un futuro próximo vamos a tener que seguir avanzando en este aspecto. Es decir, las leyes se pueden reformar y perfectamente en un futuro cercano se podrá hacer con toda seguridad el perfeccionamiento', dijo Teillier.
Ante el escenario que se instaló de una reforma a la reforma, la ministra del Trabajo, Ximena Rincón, indicó que 'estamos siempre abiertos a construir acuerdos, pero a construir acuerdos, no imposiciones'.
Francisco Tapia, abogado y académico de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica (UC) -que alegó por el Gobierno en el primer requerimiento de Chile Vamos ante el Tribunal Constitucional (TC), que afectó a la titularidad sindical-, entró de lleno en este debate, desdramatizando el riesgo de judicialización que significará la aplicación del nuevo sistema de relaciones laborales.
En conversación con PULSO, echó por tierra la tesis de que los grupos negociadores igualmente podrán negociar colectivamente. 'De todos modos, los grupos regladamente jamás podrán negociar', dice Tapia, quien en todo caso no se cierra a que en el futuro, dependiendo de su implementación, se pueda realizar un perfeccionamiento a la legislación.
Tapia, además, restó relevancia al alcance que, según varios expertos, debería tener la primera sentencia del TC, sobre los dictámenes de la Dirección del Trabajo (DT).
Tras la promulgación de la reforma se reabrió el debate por los vacíos legales del texto, los espacios de judicialización y la necesidad de una ley corta adecuatoria. ¿Comparte ese diagnóstico?
-La judicialización viene por la actividad de las partes y se da obviamente en los casos de conflictividad. Si hay una mejor negociación colectiva, no debería haber esos riesgos. Los que levantan esa idea instalan consignas. Nadie precisa qué tipo de judicialización habrá y si se dará más en tribunales ordinarios o en la magistratura constitucional. Lo mejor es esperar, estos procesos son así. No es el mejor resultado el que se dio, pero hay que ir dándole tiempo a la ley y si hay que adecuarla e interpretarla, habrá que hacerlo. Por ahora no veo un escenario tan catastrófico. Sólo se ha dado un paso más en esta área.
De acuerdo a como quedó la letra de la ley, ¿los grupos negociadores podrán negociar colectivamente en paralelo a los sindicatos?
-Ese tema se discutió en el alegato ante el Tribunal Constitucional, se pidió la supresión de las normas sobre los grupos de trabajadores. El TC accedió a esa petición, por lo tanto, no hay normas sobre grupos de trabajadores. Así lo veo yo. Hay otros que estiman que sí tienen regulación los grupos. Otros buscan sobre la base del artículo sexto del Código del Trabajo, revivir a los grupos negociadores. Pero el objetivo de los requirentes ante el TC fue claro: suprimir las normas que los regulaban, porque eso es lo que constitucionalmente se le podía pedir al Tribunal. Eso fue lo que hizo el TC, por lo tanto, no hay norma.
¿Entonces no van a poder negociar...?
-Yo creo que no, al menos regladamente. Regladamente jamás podrán negociar.
¿El dictamen que emitirá la DT sobre grupos negociadores deberá considerar el fallo del TC?
-El fallo del Tribunal Constitucional está determinado por la competencia del TC. Este Tribunal lo que tenía que hacer era suprimir o no suprimir normas. Todo lo demás que se ha dicho son sólo declaraciones. El TC no es legislador, por lo tanto, no puede establecer normas, especialmente en materia de negociación colectiva, donde hay iniciativa exclusiva del Presidente de la República, que se manifiesta a través de leyes. Creo que es muy respetable el fallo del Tribunal, pero sólo en su mérito.
¿Comparte la tesis de la titularidad sindical de facto que planteó el presidente de la Cámara de Diputados, Osvaldo Andrade, tras el veto presidencial?
-Creo que es irrelevante ese punto, es una consigna que algunos han levantado. Lo importante es cuáles son las normas que se aplicarán, lo demás no tiene importancia.
¿De todos modos, no se cierra a que en el futuro, producto de un acuerdo político, haya una ley corta adecuatoria de esta legislación?
-Ese escenario se puede dar siempre. Tenemos que seguir mejorando la ley. Las posiciones tan cerradas e irracionales dan pie a resultados malos. Hay que conversar estos temas, la democracia se hace a través de diálogo social.
DT: modernización se completará en 4 años
El abogado Francisco Tapia también es miembro del consejo de la sociedad civil de la Dirección del Trabajo (DT). La semana pasada la instancia se reunió con el director del servicio, Christian Melis, con el fin de conocer los planes de modernización de la entidad de cara a la aplicación de la Reforma Laboral. Melis mencionó primero el proyecto puesto en marcha durante este segundo semestre para mejorar estructural y operativamente a la DT, el cual estará listo en cuatro años. Éste consiste en un completo rediseño institucional que agilice y perfeccione todas sus tareas operativas, incluyendo las inspectivas y atención de usuarios. También informó sobre el proyecto que se enviará este año para modernizar la actual ley orgánica de la DT, que data de 1967. Melis explicó que el centro de este cambio apunta a ampliar las facultades de actuación de la DT.
JUDICIALIZACIÓN
'Por ahora no veo un escenario tan catastrófico. Sólo se ha dado un paso más en esta área'.
GRUPOS NEGOCIADORES
'El TC accedió a esa petición, por lo tanto no hay normas sobre grupos de trabajadores'.
EFECTO DEL TC EN DICTÁMENES
'El TC no es legislador, no puede establecer normas, sobre todo en materia de negociación colectiva'.
