Diario Estrategia

LOGO DERECHOUC 158x158

Luego que la Corte Suprema notifique al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia respecto a su fallo a favor de Transportes Delfos, referente a que tendrá que revisar y pronunciarse sobre las bases de licitación del Aeropuerto de Santiago, que regirán a Nuevo Pudahuel desde el próximo 1 de octubre, se iniciará un proceso de consulta pública que podría provocar un antes y un después en este negocio.

Acá se estima que el proceso, cuya decisión será vinculante, se extienda por unos 8 meses, por lo que Nuevo Pudahuel alcanzaría a desarrollar la concesión bajo las actuales bases de licitación, que podrían ser modificadas tras una resolución del TDLC, al menos 6 meses, y si es que las partes recurren a la Corte Suprema con recursos de reclamación, más de 1 año incluso.

En esa línea, Rodrigo Harrison, del Centro de Libre Competencia de la UC, indicó que todo proceso de revisión de bases como éste genera incertidumbre, y por tanto, se traspasa a mayores costos y precios, ya que está la posibilidad de que el negocio del concesionario se transforme de forma importante y de que posiblemente, se desarticule.

Las licitaciones en general son buenas, porque tienen dos efectos: transparencia en las compras y competencia para el mercado. Pero el problema que pueden tener es que son lentas, lo que hace que muchas veces el Estado opte por el trato directo, eso sí, en servicios específicos donde no concurriría tanta gente a una subasta y se requiere rapidez. El TDLC analizará estos dos puntos en el proceso de consulta pública.

Francisco Agüero, Director del Centro de Regulación y Competencia de la Universidad de Chile, expresó que el que el TDLC haya rechazado iniciar una consulta pública en diciembre del año pasado, hace que ocho meses después deba comenzar de nuevo a conocer las bases de una operación que ya fue concesionada, en un proceso que toma tiempo en ser resuelto.

Los expertos hacen un paralelo de este caso con el de las plantas de revisión técnica, donde el Ministerio de Transportes –al igual que el MOP- decidió no consultar al TDLC las bases de licitación y a la fecha el proceso está paralizado por distintas situaciones que se podrían haber evitado. Más aún, que existe un problema histórico en las subastas de aeropuertos en Chile.