The Clinic

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[Extracto]

En el año 2019 los distintos partidos del Congreso designaron a una Mesa Técnica con el fin de asesorar la reforma constitucional que habilitó el pasado órgano constituyente. Hoy, tras el rechazo de la propuesta de la Convención, los partidos aspiran a sumar a expertos en el nuevo proceso constituyente, pero con un rol más preponderante que en el pasado. Aquí, The Clinic recogió la opinión de siete integrantes de aquella instancia que abrió el primer intento hacia una nueva Constitución.

Entre el 24 de noviembre y el 6 de diciembre de 2019, un grupo de expertos -abogados, politólogos y cientistas políticos- designados por los distintos partidos con representación en el Congreso, se reunió para redactar la reforma constitucional que permitió elaborar una propuesta de nueva Carta Fundamental mediante una Convención Constitucional. Una experiencia similar a la “comisión de expertos” que los partidos están craneando para abrir un nuevo proceso constituyente.

Por entonces, este grupo de expertos de los partidos fue denominado “Mesa Técnica Constituyente”. Dicen los registros que trabajaron entre diez y doce horas diarias en el ex Congreso de Santiago ideando la reforma al Capítulo 15 de la Constitución vigente. Todo su trabajo quedó registrado en la web de la Biblioteca del Congreso Nacional.

La Mesa Técnica estuvo conformada por 14 expertos, siete con sensibilidad de derecha y siete con impronta progresista. Cada uno de los representantes llegó con propuestas desde sus colectividades y, pese a tener visiones contrapuestas, lograron ponerse de acuerdo en un texto que posteriormente fue presentado y votado por los parlamentarios en el Parlamento. Por cierto, todo esto con el mandato posterior a que los partidos firmaran el Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución el 15 de noviembre de 2019.

Casi tres años después de la firma de ese acuerdo y la conformación de esa mesa, los partidos políticos nuevamente se encuentran elaborando las bases para iniciar un nuevo proceso que de paso a una nueva Constitución, luego de que se rechazara con amplia mayoría -62%- la propuesta de la Convención Constitucional el pasado 04 de septiembre en el Plebiscito de Salida.

En esta discusión, una idea que ha sido transversal -a diferencia del proceso anterior- es que se incluya la participación de una comisión de expertos que pueda acompañar el proceso de redacción.

Sin embargo, aún no está claro cómo se conformará esa comisión ni cuál será su rol específico en el nuevo proceso. Algo que definirán las tratativas llevadas a cabo por los partidos que, de hecho, continuarán este viernes 23 de septiembre en el ex Congreso de Santiago, donde se darán cita los presidentes de las distintas colectividades con representación parlamentaria.

De todos modos, la experiencia más cercana en el último tiempo a una comisión de expertos transversal para estos fines, se dio a través de la Mesa Técnica Constitucional de 2019.

Los integrantes de esa mesa post acuerdo del 15N fueron: María Escudero (DC); Pamela Figueroa (PPD); Gabriel Osorio (PS); Alejandro Zúñiga (PL); Claudia Heiss (RD); Sebastián Aylwin (Comunes); Emilio Oñate (PRSC); Ernesto Silva (UDI); Arturo Fermandois (UDI); Gastón Gómez (RN); David Huina (RN); José Francisco García (Evópoli); Isabel Aninat (Evópoli); y Sebastián Soto (representante de todo Chile Vamos).

The Clinic contactó a algunos integrantes de la instancia de todas las sensibilidades, para así conocer su opinión sobre una eventual comisión de expertos que acuerden las colectividades en el itinerario constitucional en ciernes.

Expertos, muchos de ellos académicos universitarios, con amplia experiencia en poner la pelota al piso en los debates constitucionales. Esto, pues la Mesa Técnica fue la instancia más similar a lo que están planificando las colectividades para la elaboración de una nueva Constitución.

José Francisco García: “Cada institución (Cámara, Senado y Ejecutivo) nombra tres o cuatro personas”

José Francisco García es profesor asociado de Derecho Constitucional en la Universidad Católica. Durante la Mesa Técnica del 2019 participó en representación de Evópoli.

Rol de un Comité de Expertos. “El nuevo proceso debiera tener tres hitos bien definidos: habilitación del nuevo proceso, preparación del trabajo del órgano constituyente electo, y elaboración de la nueva Constitución por este órgano”.

“En el primero, de habilitación, se materializa en un proyecto de reforma constitucional y no requiere un comité técnico. Para ello, recomendaría entregarlo a las comisiones de Constitución de la Cámara y el Senado para que lo desarrollen conjuntamente en treinta días; con los asesores que estimen pertinentes, citando a profesores a audiencias públicas, y escuchando a órganos técnicos relevantes para el proceso como el Servicio Electoral”, añade.

"Para la etapa preparatoria y de elaboración de la nueva Constitución, sí se requiere una comisión técnica que acompañe el proceso para generar un texto jurídico coherente, armónico, y que relacione adecuadamente las diferentes partes de la Constitución. La naturaleza de la comisión debe ser puramente asesora, sin derecho a voto, y sin que sean electos popularmente”, concluye.

Composición de un Comité de Expertos. “Primero, con objetivos y atribuciones claras: elaborar el borrador del reglamento. Luego ayudar en su interpretación, generar un texto coherente y armónico, sistematizando los informes de comisiones temáticas y del pleno. También el avance del borrador de nueva Constitución y su armonización desde el comienzo, además de proponer soluciones ante desacuerdos como en el modelo sudafricano, entre otros”.

"Segundo, un grupo relativamente acotado de entre 9 a 12 personas, con dedicación exclusiva y/o bajo reglas de transparencia y conflictos de interés”, agrega.

“Tercero, requisitos de elegibilidad y un proceso de nombramiento exigentes. Por ejemplo, un número de años de destacada trayectoria académica y pública, o que no hayan tenido un cargo relevante en política en los últimos dos años. En algunos procesos comparados incluso se prohibió a expertos militantes de partidos políticos”, sugiere.

“En el proceso de nombramiento deben intervenir la Cámara, el Senado y el Presidente con el consentimiento del Senado. Cada institución nombra tres o cuatro personas con acuerdos por 2/3, buscando controles cruzados entre estas”, detalla.

"Cuarto, reglas de decisión de la comisión cercanas a los 2/3, incluso en algunos temas la unanimidad. En el fondo, un diseño que le dé a la comisión grados altos de autonomía de la política, potencie el “deber de ingratitud” de los designados respecto del órgano que los designa, y evite que la comisión replique los desacuerdos políticos partisanos del órgano constituyente, o sea, manipulado para resolverlos”, finaliza.

Sebastián Soto: “El rol de los expertos es importante, pero no debe ser sobredimensionado”

En la Mesa Técnica Constitucional, los partidos de derecha debían proponer siete expertos en total. Y para no desbalancear la proporción entre los tres partidos -UDI, RN y Evópoli-, eligieron a Sebastián Soto como representante del bloque en su conjunto.

Soto es Doctor en Derecho de la Universidad de Chile y Director del Departamento de Derecho Público de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica.

Rol de un Comité de Expertos. “El rol de los expertos es importante, pero no debe ser sobredimensionado. Un defecto poco destacado de la Convención fue que logró generar una alianza entre expertos enamorados de sus propias agendas, y convencionales con pocos conocimientos que no fueron capaces de contrapesarlas”.

“Por eso mismo, nunca los expertos debieran tener voto, sino sólo voz en algunas instancias: los que deben decidir son los políticos. Y me parece que debieran empezar a trabajar a la brevedad para proponer textos a la nueva Convención una vez elegida”, agrega.

Composición de un Comité de Expertos. “El comité de expertos debería ser un reflejo del Congreso Nacional, porque ahí está la pluralidad de la representación que nace de una elección reciente. No creo que deba haber algo así como una representación corporativa, pues lo que se requiere no son visiones parceladas, sino que capacidades técnicas al servicio de escribir una nueva Constitución de consenso”.

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