El Mercurio
En algún momento —mientras esperaban afuera de sus sedes de rendición, por ejemplo— los postulantes que darían la PSU se preguntaban: ¿Podrían entrar a la universidad este año? Pese a los sabotajes, el proceso siguió adelante.
Según el balance que el Sistema Único de Admisión (SUA) entregó ayer, 146 mil personas postularon a las universidades —7.901 menos que en la admisión 2019— y 116 mil fueron seleccionadas, unas ocho mil menos que en el proceso anterior (ver infografía). 'Está, obviamente, en coherencia con el antecedente de que hubo menos postulantes y menos inscritos que rindieron pruebas. Si el ausentismo llegaba, en promedio, en los últimos años al 10%, esta vez, en algunas pruebas llegó a 8% adicional', dijo el vicepresidente del Consejo de Rectores, Aldo Valle.
En un proceso distinto, las preferencias de los jóvenes también parecen haber variado. Si bien la U. de Concepción y la U. de la Frontera siguen siendo las más requeridas —reciben 8,8 y 8,3 postulaciones válidas por cada vacante ofrecida— esta vez el tercer lugar es ocupado por la U. de los Andes. Allí, 7,5 solicitudes se disputaron cada cupo; el año pasado fueron 6,19.
'La formación que entregamos, la investigación e innovación, el buen desempeño profesional de nuestros egresados hacen que cada vez más alumnos nos elijan', afirmó Carolina Jacir, directora de Admisión y Promoción de ese plantel. La universidad vio un incremento de 17% en sus postulaciones y, además, un aumento de 2,1% en los alumnos provenientes de colegios particulares subvencionados. Los puntajes de corte subieron en todas sus carreras, alrededor de 14 puntos en promedio.
La U. Finis Terrae, que pasó de tener 4,82 a 6 postulaciones por vacante, registró un aumento de 20% en sus solicitudes válidas. La U. Adolfo Ibáñez, en tanto, tuvo 4,7 requerimientos por cada cupo que ofreció. El año pasado, eran 4,37. Sus postulaciones efectivas fueron 307 más. Sobre el aumento en la demanda por ingresar a la institución, el rector Harald Beyer planteó que 'tenemos un modelo educativo que es único en Chile y que a los jóvenes y a sus familias les comienza a hacer sentido. Se traduce en que una formación excesivamente especializada no es la más apropiada para los tiempos actuales'. El plan común del plantel incluye focos como el desarrollo del pensamiento crítico, la resolución de problemas y la participación en equipos multidisciplinarios.
Otro factor, según Beyer, serían 'las innovaciones que estamos haciendo' en las mallas. Entre otros ejemplos, apuntó a la incorporación de la ciencia de datos en Ingeniería y gestión de redes sociales en Periodismo.
Con todo, la UC y la U. de Chile captaron a 87 de los puntajes nacionales.
Sube la vara en Derecho
Tanto el Demre como el SUA habían advertido que, debido al reemplazo del puntaje de la cancelada prueba de Historia —por el mejor resultado que cada joven tuviera en otra prueba, en sus notas o en el ranking—, el panorama en las carreras humanistas podría modificarse. Esto, considerando que, en promedio, los resultados asociados a ese test subieron 99 puntos.
Derecho en la U. de Chile, la segunda carrera con más postulaciones del país registró un alza en los interesados. 'Una diferencia importante que hemos notado es el aumento significativo de postulantes a nuestra facultad en comparación con las vacantes ofrecidas. El año 2019 hubo 2.288 postulaciones y en 2020 recibimos 2.707 postulaciones', destacó el decano Pablo Ruiz-Tagle. El último alumno que fue seleccionado el año pasado promedió 688,2 puntos. Esta vez, tuvo 705,25.
En la UC, el corte subió de 712,55 a 728,05 y el puntaje promedio de los seleccionados se elevó desde 742 a 757. 'Estamos contentos, porque, a pesar de las dificultades, hemos obtenido la preferencia de los mejores estudiantes del país, destacándose para este proceso el aumento de los alumnos procedentes de otras regiones y de estudiantes provenientes de colegios particulares subvencionados', señaló el decano, Gabriel Bocksang.
Variaciones similares se vieron en otros planteles. En la UC del Maule, el corte en Derecho subió —podría variar si corre la lista de espera— de 588 a 609,45. En la UC de la Santísima Concepción, donde en 2019 la última persona se matriculó con 612,4 puntos, el corte subió 13 puntos. En la U. de los Andes, en tanto, el alza fue de 17,3 puntos sobre los 654,7 del proceso anterior. En Historia, señala la directora, Carolina Jacir, el impacto fue mayor: subió 30,1 puntos, sobre los 573,3.
Derecho en la U. de Talca —en la ciudad homónima— también registró alzas: el último seleccionado tiene 29,95 puntos más que el año pasado. En el campus Santiago, en tanto, subió 17,5 puntos. En la U. de Valparaíso, el cambio fue más sutil. El puntaje de corte fue de 618,95, 5,2 puntos más que en el proceso anterior.
