La Tercera
Señor Director:
Qué felices palabras las del presidente (s) de la Corte Suprema, ministro don Sergio Muñoz, al explicar algunos fallos en materia de salud y vida, que últimamente les ha tocado decidir, con motivo de acciones de protección, a raíz de prestaciones de salud negadas por Fonasa e Isapres, por ser muy caras o no estar registradas al efecto.
Y es que el Estado y toda su organización y funciones no tiene otra causa o fundamento que servir a la comunidad y proveer al bien de todos y cada uno de sus miembros, en cuanto son partes de ella. No existe el Estado para proyectos de ingeniería social o experimentaciones ideológicas ajenas a la realidad de las personas de carne y hueso, probadamente fracasadas.
Merece alabanza, también, por recordar que la Constitución existe, tiene aplicación directa y es obligatoria para todo órgano del Estado (arts. 1° inciso 4°, 5° indso2°6°y71, algo que tan a menudo olvidan legisladores, Contralor y gobernantes, y que para recordarlo están precisamente tos jueces, especialmente cuando están afectado los derechos fundamentales, sobretodo la vida, sin la cual los demás carecen de todo sentido.
Gracias al ministro Muñoz, que sus palabras sean faro luminoso para todos los jueces de la República, que son el único baluarte de los ciudadanos frente al abuso de quienes detentan el poder estatal.
