Publimetro
Gabriela Novoa 158x158
 
Si bien no hay una regulación específica respecto del comercio electrónico, sí existe normativa dentro de la cual este tipo de transacciones están amparadas por un entorno legal y de protección a consumidores y proveedores'
Hemos mencionado antes, en este mismo medio, que las Pequeñas y Medianas Empresas (pymes) son un motor relevante para la economía de nuestro país, ya que constituyen la principal fuente de generación de empleo, contribuyendo al emprendimiento y la innovación. 

Hace unos días, fuimos testigos del fuerte impacto que genera en el comercio los llamados 'Cyber Day' o 'Cyber Monday', sin perjuicio de las ofertas posteriores que mantienen, casi con el impulso de estos días, algunas empresas. 

Si bien es sabido que el aumento de las transacciones electrónicas ha sido sostenido en el tiempo, este año, de acuerdo a la información que mantiene la Cámara de Comercio de Santiago, las cifras de ventas logradas fueron históricas. 

Asimismo, se destaca la disminución de los reclamos al Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), hecho que implica que estamos trabajando en la línea correcta, ya que los proveedores están entregando bienes y servicios reales y de buena calidad. 

Desde el punto de vista legal, si bien no hay una regulación específica respecto del comercio electrónico, sí existe normativa dentro de la cual este tipo de transacciones están amparadas por un entorno legal y de protección a consumidores y proveedores. 

Entre estas normas legales destacan las que se refieren a la formación del consentimiento contenidas en el Código de Comercio, además de leyes que, en forma más específica, aplican a esta materia, como es la Ley N°19.496 sobre Protección de los Derechos de los Consumidores y la Ley N°19.799 sobre Documentos Electrónicos y Firma Electrónica. 

En cuanto a la perspectiva de las micro, pequeñas y medianas empresas, entrar en el mundo del comercio electrónico representa una serie de ventajas, en la medida en que se encuentren disponibles para invertir en canales digitales, tengan un buen servicio post venta, con páginas de accesos simples y amigables y con sitios seguros para hacer transacciones. 

Si bien hoy existen muchas empresas pequeñas y de menor tamaño y microempresas que venden por internet a través de Facebook o incluso Instagram, el mayor inconveniente desde el punto de vista del consumidor, es que el medio de pago mayormente aceptado es el efectivo (a través de trasferencias bancarias, por ejemplo), por lo que es fundamental que puedan abrirse a otras alternativas para ser más competitivos, considerando que esta plataforma les permite vender sin tener que contar con instalaciones que aumenten sus costos fijos. 

Lo que deben tener siempre presente es que no obstante estas ventas sean realizadas en el 'cyber espacio', deben cumplir con todas las normas legales que las regulan, ya sean tributarias, aduaneras en caso que correspondan, laborales, contractuales, de protección al consumidor, etc. 

Si quiere más información o tiene dudas sobre éste u otros temas, consulte gratuitamente en la Clínica Jurídica Derecho UC al correo electrónico depal@uc.cl o al teléfono (56 2) 26862195.