Diario Pulso
Cuatro son las materias de la Reforma Laboral que busca impugnar la oposición con el requerimiento que presentó ante el Tribunal Constitucional (TC): extensión de beneficios, titularidad sindical, sindicato interempresas y derecho a la información.
De todos los temas en controversia, en la Nueva Mayoría (NM) han reconocido que el que más preocupa y pondría en jaque los cimientos de la reforma, si es que la magistratura lo declara inconstitucional, es extensión de beneficios. "Ahí está el corazón del proyecto, eso va a permitir el crecimiento de los sindicatos en un par de años", dice un senador de la NM.
La centroderecha alega que está norma vulnera la libertad sindical, ya que forzaría a los trabajadores a afiliarse a un sindicato para recibir las mejoras pactadas en la negociación colectiva. Este punto generó un fuerte debate incluso al interior del oficialismo, donde sectores de la DC, como los senadores Andrés Zaldívar e Ignacio Walker, advirtieron a La Moneda la posibilidad de que se caiga en el TC.
Así también lo hizo saber el diputado Osvaldo Andrade (PS), quien hasta el último minuto del debate legislativo planteó sin éxito la posibilidad de mejorar su redacción para reducir los riesgos de inconstitucionalidad.
Sin embargo, en los últimos días las autoridades y asesores de los ministerios del Trabajo (Mintrab) y de Hacienda han salido a poner paños fríos frente al temor de que la extensión pudiera perderse en el Tribunal, explicitando que el Ejecutivo tiene una carta guardada bajo la manga para asegurar la defensa de la norma.
"En el Gobierno hay gente que sabe de estos temas, pero hay otros que no. Los que tenemos conocimiento en el área intentamos reducir el riesgo de desplome con un cambio que hicimos a última hora", señala un alto personero del Ejecutivo.
En ese plano, uno de los argumentos que haría presente en su alegato ante el TC el equipo jurídico de la Segpres y del Mintrab, encabezado por los abogados Francisco Tapia, Fernando Atria y Paulina Veloso, es una indicación que presentó el pasado 2 de marzo el Gobierno en el Senado, y que terminó siendo aprobada en el Congreso, que abre la puerta a que el traspaso de los beneficios por afiliación al sindicato se deba realizar con acuerdo del empleador.
"La afiliación sindical otorga de pleno derecho a los nuevos socios los beneficios del instrumento colectivo suscrito por la organización sindical a la que se incorporen, conforme a los requisitos establecidos en dicho instrumento, a partir de la comunicación de la afiliación al empleador", dice la redacción del texto que pasó desapercibida por los legisladores, justo cuando estaba sobre la mesa de la negociación política la opción de que la extensión por afiliación sea con consulta a los privados.
A juicio de los juristas que asesoran al Ejecutivo, la frase: "se incorporen, conforme a los requisitos establecidos en dicho instrumento (colectivo)" permite la correcta lectura de que la extensión se dé con la anuencia de la empresa.
El asesor sindical y experto en derecho laboral, Juan Vergara, coincide con esa interpretación. "Tanto la extensión misma como los beneficios a extender están condicionados a la voluntad del empleador.
Al establecer 'conforme a los requisitos establecidos en dicho instrumento', se le otorga al empleador una amplia gama de posibilidades para condicionar la extensión de beneficios a futuros socios a, por ejemplo, antigüedad laboral, cargo o función, u oportunidad en el pago (como incrementos de sueldo). Con eso la extensión quedó reducida a su mínima expresión", señala. Una visión opuesta tiene el abogado de LyD e integrante del equipo jurídico que asesora a la oposición en su requerimiento, Sergio Morales: "La expresión conforme a los requisitos establecidos en dicho instrumento, da la impresión de que la extensión siempre tiene que ser pactada. Pero ese no fue el espíritu de la norma.
El Ministerio del Trabajo jamás respondió que ese era el objetivo cuando se hicieron las reservas de constitucionalidad. Lo que se aprobó fue la extensión automática por afiliación al sindicato. Ahora están haciendo una vuelta de carnero para interpretar este concepto, el cual tiene muchas lecturas"
