Diario Financiero

Ricardo Irarrázabal 158x158

Ya es bueno que nos vayamos acostumbrando a esta palabra: REP, que significa "Responsabilidad Extendida del Productor". El proyecto de ley, cuya tramitación comenzó en la Administración del Presidente Piñera, debiera aprobarse en el Congreso este año o a más tardar a inicios del próximo.

Lo que pretende este proyecto es aumentar la valorización de residuos, esto es, el reciclaje, estableciendo un nuevo instrumento de gestión ambiental del tipo comando y control, pero con una flexibilidad que lo acerca a los instrumentos económicos ¿Cómo funciona? Lo comando y control sea expresa en ciertas metas de reciclaje que han de ser acreditadas por quien comercializan importa los "productos prioritarios" (fabricante o importador de aceites lubricantes, aparatos eléctricos y electrónicos, baterías, neumáticos, etc.). Y lo económico, tiene que ver con que dicho cumplimiento puede llevarse a cabo en forma colectica por parte de productores del mismo rubro, a través de sistemas de gestión, los que bien administrados, generan economías de escala que permiten que el cumplimiento de la meta pueda realizarse a un menor costo ¿Por qué esto último es importante? Porque los mayores costos de reciclaje serán lógicamente traspasados al precio de los productos, lo cual terminará siendo pagado por los consumidores. En este sentido, resulta esencial, para que este instrumento funcione bien, otorgarle espacio y flexibilidad a los productores para el cumplimiento de sus metas a través de los señalados sistemas de gestión. Las interferencias del Estado y otras múltiples restricciones que se fueron agregando al proyecto de ley, tales como exigencias de ecosideño y mecanismos varios establecidos, significan un dirigismo estatal que llevará a que el reciclaje sea más costoso y que los precios de los productos aumenten.

Ahora bien, ¿los distintos gremios se han ido preparando para poder cumplir con las exigencias de este instrumento? Lo más relevante tiene que ver con contar con la información necesaria para participar en la discusión de los decretos que establezcan las metas, formulándose distintos escenarios de metas y preguntándose cuál sería el impacto a nivel de precio de cada escenario con o sin sistema de gestión. Sin dicha información, los gremios y productores quedarán afuera de la discusión. Luego, es muy relevante, a la luz de la información señalada, formular propuestas de modelos de negocio en relación al modelo de licitaciones, y si existen gestores y mercado para el reciclaje. Al respecto, hay que pensar en modelos de negocios desde el punto de vista del sistema colectivo y de los gestores. Finalmente, se requiere pensar en modelos jurídicos para los sistemas de gestión y para las licitaciones. Recordemos que los sistemas de gestión son personas jurídicas que no distribuyen utilidades, y que respecto a las cuales y su funcionamiento, se requiere de un informe del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia que asegure que no existen prácticas anticompetitivas.