El Mercurio

rodrigo bordachar96x96

Señor Director:

En 2013 asumí un proceso penal por lesiones graves en accidente de tránsito, en calidad de abogado de la víctima. En julio presentamos la querella criminal, en la que solicitamos al Ministerio Público realizar diversas diligencias, y desde entonces he tratado de reunirme con el fiscal a cargo de la investigación. He ido unas cuatro veces a la fiscalía, solicitando por escrito audiencia con el fiscal a cargo, y no he recibido respuesta alguna. Solo un largo silencio.

Por ello recibí con particular indignación una resolución del 13er Juzgado de Garantía, que cita a una audiencia de comunicación de no perseverar, solicitada por el Ministerio Público. Es decir, sin escuchar a la víctima, el Ministerio Público decide no continuar con la investigación, no formalizar al imputado y archivar el proceso.

Tan pronto recibí la decisión de no perseverar, intenté comunicarme con la fiscalía local y consultar qué había pasado con mis solicitudes de audiencia, pero tras varios intentos llamando al call center fue imposible, ya que la línea estaba ocupada, o se me contactaba, por largos minutos, solo con grabaciones.

Luego de este fallido intento, traté de comunicarme directamente con la Fiscalía Metropolitana Oriente. Me contesta una grabación que me dice que si soy una víctima o testigo, ¡debo llamar al mismo número del call center!, y la comunicación se cortaba.

Podría seguir con más particularidades. Pero lo que quiero es llamar la atención de que si como abogado recibo este trato, cómo es que se atiende a las víctimas que directamente hacen una denuncia ante el Ministerio Público.

Los fiscales deben dar a las víctimas "usuarias" de sus servicios un trato digno y no reiterar la sensación de victimización de la que son sujetos.