La Tercera / Aminera.cl
EL fin del cartel del potasio entre las empresas Uralkali (rusa) y Beloruskali (bielorrusa), puso de relieve no sólo la dependencia de otras empresas del rubro de ese esquema, como la canadiense PCS y la chilena SQM, sino que también la continua aparición de asociaciones, a menudo cuestionadas por ser contrarias a la libre competencia, para manipular precios y producciones a nivel internacional.
Hace 10 años el entonces presidente de Sotheby's fue encarcelado por el cartel que operaba con Christie's en el mercado del arte. Más reciente es la investigación de la Unión Europea (UE) contra Apple y varias editoriales para manipular el precio de los libros electrónicos, donde se han suscrito acuerdos extrajudiciales para cerrar el tema.
Ese es un patrón: la mayoría de los casos que se investigan en la UE luego tienen lugar en EE.UU. y viceversa, explica María Elina Cruz, directora del Centro de Libre Competencia de la Universidad Católica.
Notoriamente, las empresas europeas son más proclives a formar carteles. Según datos del American Antitrust Institute, 49 de 86 empresas cartelizadas entre 1990 y 2005 eran de Europa occidental, contra sólo 18 de Norteamérica; a ellas correspondían 278 violaciones a las leyes de libre competencia, de 433 en total.
BASF, la química alemana, es la más involucrada en acciones indebidas (26 en el período), seguida de la francesa Total (18).
La Dirección General de la Competencia de la UE ha sancionado 56 casos de carteles internacionales entre 1990 y 2009, de los 433 investigados (ver infografía).
En promedio, los carteles internacionales están formados por ocho empresas y han funcionado por cerca de 10 años.
Aunque hay carteles que cuentan con el apoyo de los gobiernos, generalmente carteles de exportación que son legales en el país de origen en tanto no dañen la industria doméstica, la mayoría atenta contra la libre competencia vía diversas formas (ver infografía).
La industria química ha sido tradicionalmente la más proclive a formar carteles, seguida de cerca por la de manufacturas. Ambas están representadas en los casos más notorios.
Generalmente, las empresas cartelizadas gozan de gran concentración de mercado o tienen sobrecapacidad. Asimismo, los carteles se forman tanto cuando las condiciones de mercado son adversas, como cuando son estables o incluso optimistas.
