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Su familia siempre le decía que llegaría a ser abogada por lo "peleadora" que es. Su abuelo era abogado, pero nunca ejerció. Paula Vial (43), la defensora de Manuel Lagos, entró a la Católica y fue una de las mejores alumnas. Hizo la práctica durante seis meses en la Penitenciaría.
Nació en Argentina, porque su madre es de allá y su papá de acá. Estudió en cinco colegios distintos en el ir y venir de Buenos Aires a Santiago. Llegó a ser la primera defensora nacional luego de hacer un doctorado en derecho penal en la Complutense de Madrid, postuló y ganó. Fue nombrada por Michelle Bachelet y se impuso en un mundo de hombres. "Para una mujer simpre es más difícil competir", reconoce. Se declara feminista y advierte que "debiera haber mucho más mujeres en los puestos de autoridad". Luego de tres años como defensora nacional, armó su propio estudio de abogados con cinco amigos: Vial y asociados.
Su último triunfo fue ganar la audiencia donde pidió el cambio de tribunal del Duodécimo al Octavo para que se investigue el caso de Manuel Lagos. "Me gusta trabajar y llegar preparada. Estoy leyendo constantemente y estoy súper actualizada porque hago clases en la Universidad Católica, eso te obliga a estar con las antenas paradas", cuenta Paula, quien además es panelista de "Palabras sacan palabras", de radio Futuro y de "Ciudadanos", de CNN. El tiempo debe repartirlo con la familia que armó con su pareja abogado, con los tres niños de él y con su hijo de nueve años. También se dedica harto al shopping. Adora los tacones de más de diez centímetros, las carteras y los vestidos con llamativos estampados. "No puedo andar sin tacos", admite aun cuando mide 1 metro 70 centímetros.
-¿Cómo llegaste a ser defensora de Manuel Lagos?
-No lo conocía, no tenía la suerte, porque de verdad que es una persona súper extraordinaria. Se nota, es un hombre cálido. El viernes 31 de mayo me reuní con él por primera vez, fui a visitarlo a la cárcel. Nunca había conocido una persona donde tan uniformemente todos los que lo conocen lo señalaran como alguien valioso. Es bueno de corazón. Por eso parece más injusto lo que le está pasando. Que a partir de su causa se genere un debate público me parece bien extraordinario.
-¿Por eso lo representas?
-Mi estudio no lleva causas de drogas, pero ésta nos pareció que era una causa distinta. De alguna manera podía estimarse que no era de tráfico, que son causas que son bien estigmatizadoras también para los abogados. Hice una excepción absolutamente y me lo pensé mucho.
