Se trata de la tercera edición de este documento, que busca convertirse en una guía para los tomadores de decisión en la esfera pública y privada.

A través de una transmisión vía Zoom, el Centro UC de Estudios Internacionales presentó la tercera edición del índice Riesgo Político América Latina 2023, trabajo que fue editado por el profesor Jorge Sahd y los investigadores Daniel Zovato y Diego Rojas.

1.023 personas del público general fueron consultadas para desarrollar este trabajo y, adicionalmente, se conformó un panel de 48 expertos de América Latina y el Caribe, que incluyó a expresidentes, autoridades regionales, líderes de opinión y académicos.

El texto alerta sobre la creciente inseguridad en la región, el continuo deterioro democrático y una cada vez más compleja gobernabilidad. En orden de importancia, los diez riesgos que se identificaron son: crimen organizado; retroceso democrático; gobernabilidad compleja; nuevos estallidos de malestar; crisis migratoria; inseguridad alimentaria; polarización y noticias falsas; pérdida de competitividad; aumento de ataques cibernéticos; y debilitamiento de la integración regional.

Según este trabajo, el 2023 será un año complejo y retador para la región, que deberá enfrentar un contexto internacional desfavorable en el que se espera, según el FMI, una desaceleración simultánea de los tres principales motores económicos (EEUU, China y UE), cuyo efecto será un débil crecimiento económico global de 2,7% -o incluso podría ser inferior al 2%, según su director- y con posibilidades, cada vez más ciertas, de que algunas economías entren en recesión.

A lo anterior se suman los procesos electorales -presidenciales y legislativas- en Paraguay, Guatemala y Argentina, junto a otras elecciones de gran importancia. De estos procesos importa observar dos tendencias principales: si se mantendrá el voto de castigo a los oficialismos; y si seguirán triunfando los gobiernos progresistas o veremos un cambio de ciclo político favorable a gobiernos de centroderecha o derecha a nivel regional.

Para Jorge Sahd, dos elementos serán centrales este año. El primero es la reconfiguración del mapa político, con el regreso de la marea rosa 2.0, donde 5 de las 6 principales economías de la región serán gobernadas por fuerzas de izquierda. “Es probable que los ciclos políticos actuales sean más cortos que en el pasado, porque el voto de castigo es el que está marcando todas las elecciones en América Latina desde 2019. El segundo elemento es un gran enfriamiento de la economía, donde la región podría llegar a crecer menos de 1% del PIB. Esta caída, sumado al aumento de la inflación y el costo de vida y las mayores restricciones financieras, puede generar nuevas explosiones de malestar social", sostuvo.

En cuanto a los riesgos políticos, a juicio de Daniel Zovatto “que el crimen organizado ocupe el primer lugar demuestra que la inseguridad es una sensación generalizada en la región; mientras que el retroceso democrático refleja el deterioro que están sufriendo las democracias e instituciones políticas, como hemos visto recientemente en Brasil y Perú. Por último, por tercer año consecutivo la migración figura entre los principales riesgos políticos, siendo señalado por el panel de expertos en primer lugar".

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