La exalumna de la Facultad se desempeña actualmente como la gerenta legal de la Red de Salud UC CHRISTUS y nos comenta cómo ha sido enfrentar la pandemia desde la perspectiva legal.

Lo que se ha denominado como la primera línea para enfrentar la pandemia no sólo abarca profesionales de la salud. Para que estos profesionales puedan desarrollar eficientemente su labor se necesita un back office que genere las condiciones necesarias para mantener la operación. Y es desde esta trinchera que destaca la labor de la exalumna de la Facultad y profesora de Derecho Comercial y Clínica Jurídica de la Facultad, Gabriela Novoa, quien lidera la gerencia legal de la Red de Salud UC CHRISTUS.

Egresada el año 1990 de Derecho UC, Gabriela comenta que el tiempo de pandemia ha sido muy exigente para todo el equipo. “Si bien son los médicos, enfermeras y auxiliares los que han estado en ‘primera línea’, todo el trabajo del área administrativa, dentro del cual nos encontramos los abogados, ha sido también muy relevante para que todo siga operando y funcionando lo más normal posible”.

Lo más complejo en un primer tiempo, agregó, fue ir adaptándose a todos los cambios normativos desde la declaración de estado de excepción constitucional. “No solo por las restricciones derivadas por el toque de queda y la cuarentena, sino por el análisis permanente de la regulación que cambia día a día y que implica que tenemos que adaptar la operación tanto hospitalaria como ambulatoria y cumplir satisfactoriamente con las fiscalizaciones de los reguladores”.

A pesar de los efectos de la enfermedad, la experiencia de participar activamente en esta crisis ha sido muy enriquecedora, agregó. “En mi opinión, nadie estaba realmente preparado para una situación como la que estamos viviendo. Si bien pudimos prepararnos de mejor forma que los países donde comenzaron los primeros contagios, era imposible anticiparse al desarrollo que tendría en el país. Desde el punto de vista normativo, pienso que la integración de la red público – privada y la coordinación de los pacientes a través de un sistema centralizado, fue un mecanismo que ha permitido que se enfrentara el peak de contagios de una buena forma”.

Consultada sobre las habilidades que debe tener un abogado para enfrentar una contingencia como esta, la académica UC asegura que la clave es la flexibilidad para adaptarse a los cambios que se requieren día a día. Es necesario “entender cómo funciona el negocio, para lo cual uno tiene que involucrarse en temas y áreas que van más allá de los temas legales y, en este marco, ser protagonista de soluciones y aportes y no entregar como respuesta solo problemas ni negativas”.

Creo, agregó, que las herramientas que me entregó la Facultad y la carrera han sido clave en este contexto. “Haber entrado a estudiar Derecho a la UC (primera generación UC en la familia) es una decisión de la que me alegro cada día. La formación de la Facultad me permite hasta el día de hoy, enfrentar de manera segura y con amplitud de visión cada uno de los desafíos profesionales con los que me enfrento”.