La Segunda
El pasado 29 de abril una denuncia remeció a la congregación de los jesuitas en Chile, luego que se conociera que se había iniciado una investigación previa por actos de 'connotación sexual' en contra del sacerdote Felipe Berríos (65). La denuncia de la mujer, menor de edad al momento de los hechos, hizo que se activaran los protocolos del Centro de Prevención de Abusos y Reparación de esa institución.
De acuerdo a información recogida por La Segunda, la mujer declaró esta semana, pero no hay mayores detalles de su testimonio: solo que es creíble, razón para que se haya abierto la indagatoria.
El abogado Juan Pablo Hermosilla, que representa a la víctima a través de la Fundación para La Confianza, confirmó la diligencia: 'Sí, efectivamente la denunciante ya prestó declaración'. Hermosilla se excusó de entregar más detalles.
Consultada por el La Segunda, la abogada a cargo de la investigación canónica previa, María Elena Santibáñez, explica: 'Comencé con las diligencias investigativas el miércoles'. La profesional se hizo cargo el pasado martes 4 de mayo, cuando se conocieron públicamente los hechos y la compañía a la que pertenece Berríos envió un comunicado de prensa.
Lo que se sabe es que el denunciado, en este caso Berríos, ya escuchó los hechos que se le imputan a través del relato de la víctima que le leyó la abogada. Se contempla que se reúna nuevamente con Berríos y con una serie de testigos que seguirán prestando declaración.
Santibáñez, profesional de bajo perfil, tiene experiencia en materia penal, es laica, y cuenta con una dilatada carrera académica. Además de conocer cómo opera el sistema por su trabajo en el M. Público.
En la diligencia, Berríos estuvo acompañado de su abogado Julián López, reconocido penalista de la plaza y que en los últimos años estuvo a cargo de la defensa de Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín en el caso Penta. El sacerdote no tiene vínculos con López: fue elegido dentro de una lista de defensores que no podían tener conflictos de interés con este caso ni con otros relacionados a la Iglesia.
La cadena de hechos
El 4 de mayo pasado, cuando se conoció el origen de la investigación, la compañía publicó un comunicado: 'La Compañía de Jesús en Chile informa que el jueves 28 de abril se recibió una denuncia de una mujer adulta en contra del jesuita Felipe Berríos por hechos de connotación sexual. Tales sucesos habrían ocurrido cuando la denunciante era menor de edad'.
Casi al mismo tiempo del comunicado de su congregación, el sacerdote Berríos se refirió al tema a través de un comunicado público: 'He tomado conocimiento de la denuncia en mi contra que ha sido informada a través de un comunicado de la Compañía de Jesús'.
Al momento de emitir la declaración, no había tenido el primer encuentro con la abogada instructora en la investigación y solo agregó: 'No he sido informado de nada distinto de lo que dice ese comunicado. Haré todo lo que sea necesario por conocer y aclarar los orígenes de esta denuncia y me he puesto, desde ya, a disposición de la compañía para esclarecer los hechos con la mayor celeridad posible'.
Los jesuitas informaron que con fecha 2 de mayo decretó la apertura de una investigación previa canónica, nombrando a la abogada María Elena Santibáñez. Mientras se realiza la investigación canónica se dispuso la suspensión del ejercicio del ministerio sacerdotal de Berríos.
