El Mercurio
No es una cara desconocida en el mundo regulatorio. Ayer, el gobierno designó a Solange Berstein como presidenta de la Comisión para el Mercado Financiero (CME), en reemplazo de Joaquín Cortez. La ingeniera comercial de la de Santiago y PhD en economía de la U. De Boston lideró la gerencia de la división de política financiera del Banco Central desde 2017 y, previamente, fue superintendenta de Pensiones (2006-2014), entre otros destacados cargos. Su designación fue valorada por un amplio espectro de exautoridades, abogados y analistas del mercado.
“Es un nombre excepcional, una persona brillante, preparada, conoce muy bien el mercado de capitales: le tocó jugar un rol muy importante dentro del Banco Central en la crisis del covid y su impacto en la economía”, dice el exministro de Hacienda Ignacio Briones. “Es una persona con mucho conocimiento de todos los sectores del mundo financiero”, plantea Guillermo Larraín, ex Superintendente de Valores y de Pensiones.
Me parece un buen nombramiento: Solange tiene mucha experiencia en el mercado financiero, fue superintendenta de Pensiones, trabajó en el Banco Central, y ahí tiene un vínculo con Mario Marcel, lo que es bueno para efectos de coordinación", dice Fernando Coloma, exsuperintendente de Valores y Seguros. "Es una persona eminentemente técnica y eso es muy bueno". Sin embargo, llega a una institución que recién se está terminando de formar y con varios desafíos pendientes.
“La CMP tiene que velar por la regulación del mercado financiero, desde un punto de vista colegiado: todavía lleva poco tiempo, tiene desafíos institucionales, regulatorios, materias bancarias”, dice Briones.
Solo “el año pasado la CMF cambió su estructura interna, haciendo una subdivisión entre supervisión de insolvencia de las entidades financieras y, por otra parte, de conducta de mercado”, advierte Juan Luis Goldenberg, profesor de Derecho de la U. Católica y consejero externo de Baraona & Cia. “Entonces el reto es implementar: se coordina con otras entidades, como el Sernac por ejemplo”.
Y hay una diferencia con su antecesor. “Ella es una persona más cercana a lo técnico y regulatorio, y con menos experiencia que Cortez por el lado delas inversiones y el funcionamiento en el detalle del mercado de capitales”, dice Luis Flores, gerente general STF Capital.
“Joaquín tuvo en su experiencia el ser gerente de Inversiones de Pro Vida”. Pero la llegada de Berstein no significaría un cambio drástico en la CMF. “Antes había una autoridad unipersonal, y en este caso hay una comisión, la que se mantiene en una alta proporción como venía”, dice Fernando Coloma. “Entonces el sesgo técnico que tenga Solange tiene que conversar adecuadamente con la trayectoria que siga la comisión. La CME “ahora tiene una lógica más institucional y autónoma”, coincide Guillermo Larraín.
Retos y deudas
Para Max Spiess, abogado de Espacio Público, entre sus principales desafíos estará abordar los requerimientos regulatorios que emanen de la nueva Constitución. Además, profundizar los avances en requerimientos de ESG, derechos humanos y de gobierno corporativo para empresas privadas y públicas. “El foco vendrá por mejorar las normas ESG y ambientales, y cómo las empresas deberán poner a disposición del mercado métricas comunes”, dice Rodolfo Friz, de Propela Inversiones. El reto está, particularmente, “en el desarrollo de normativas fintech y de criptomonedas”, dice por su parte Flores, de STF. “Deberá rehacer la ley fintech para que esta aborde las necesidades de actualización del mercado con una mirada progresista de largo plazo”, dice Spiess.
Para María Ester Paredes, socia de EDN Abogados, “hay tópicos que han estado persistentemente cuestionados, como operaciones de las personas políticamente expuestas, donde la transparencia de información es vital para mantener la credibilidad en los mercados”, dice.
Añade que una mejor aproximación en torno al uso de información privilegiada “es un tema pendiente de abordar”. “Delitos que en Estados Unidos son con pena de cárcel y acá no tenían esa pena, ahora sí lo son”, dice Briones, aludiendo a la ley de agentes de mercado que se aprobó a principios de 2021. Ve necesario “sancionar con uso de información privilegiada, que destruye la confianza de los mercados”.
