La Tercera / Pulso
Sepultadas quedaron las aspiraciones de la Central Autónoma de Trabajadores (CAT) y la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) de pasar a integrar el Consejo Superior Laboral (CSL), instancia de diálogo tripartita que creó la Reforma Laboral. Hace unos días la tercera sala (constitucional) de la Corte Suprema rechazó la apelación de la CAT y la UNT a un fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago que validó el 'trato preferente' que dio el gobierno anterior a la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) en el Consejo Laboral.
'Que, para acoger la presente acción debe constatarse el carácte preexistente e indiscutido de un derecho afectado, condición que no se verifica en la especie porque el derecho cuya protección se persigue por esta vía no tiene el carácter de indubitado', reza la sentencia redactada por el supremo Arturo Prado Puga.
La CAT y la UNT cuestionaron la supuesta ilegalidad en la designación de Bárbara Figueroa (presidenta), Nolberto Díaz (secretario general) y José Sandoval (dirigente) de la CUT en el Consejo, sin haber dado espacio de representación a otras organizaciones. Asimismo, ayer el subsecretario del Trabajo, Fernando Arab, informó la designación de los tres nuevos consejeros por parte del Gobierno en el CSL.
Por el ministerio de Economía se nombró a la abogada Carmen Elena Domínguez; por el ministerio del Trabajo al jurista Cristian Olavarría; y por la cartera de Hacienda al economista Rafael Sánchez. En la sesión de ayer del Consejo también se revisó el informe sobre el primer año de implementación de la Reforma Laboral, que será presentado por el CSL durante la segunda quincena de abril a La Moneda y al Congreso.
