La Segunda
Los grupos Paulmann y Luksic son los que mejor remuneran a sus ejecutivos. La empresa insignia de Paulmann, Cencosud, y tres compañías que están bajo el paraguas de Luksic, su holding Quiñenco, la cervecera CCU y el Banco de Chile, están entre las cinco sociedades anónimas abiertas con el mayor salario promedio pagado en 2016 a su equipo gerencial.
Este resultado surge a partir del levantamiento de la información pública entregada por las 40 empresas que integran el Índice de Precios Selectivo de Acciones (IPSA) de la Bolsa de Comercio mediante sus memorias y estados de resultados anuales. La normativa de la SVS (ver recuadro) establece que todas las empresas que supervisa deben dar a conocer la remuneración global de su equipo de ejecutivos principales, es decir, no se da a conocer cuánto gana el gerente general, el de finanzas o el de operaciones, sino lo que recibe todo el grupo en conjunto.
En el ejercicio realizado por La Segunda, se dividió la remuneración global que pagaron estas sociedades a sus respectivos equipos gerenciales, por el número de ejecutivos principales que las propias empresas informaron, lo que dio como resultado un ingreso promedio anual por gerente.
Entre los hallazgos destacados, Cencosud, la mejor pagadora en 2016 y 2015, canceló un global de $6.311 millones a sus 12 ejecutivos principales, liderados por Jaime Soler. En ese total se incorpora $1.382 millones de pagos en acciones. En promedio, fueron $526 millones.
CCU, la segunda en el ranking, distribuyó un total de $7.566 millones a su equipo encabezado por Patricio Jottar. Consultada la empresa, explicó que esa cifra incluye remuneraciones e indemnizaciones (que no especificó en la memoria y que no desglosó), lo que justifica el salto en el ranking del lugar 13 al 2. Si ese monto total se divide entre los 18 ejecutivos actuales, son $420 millones anuales.
Quiñenco aparece en el tercer lugar, con una remuneración global a repartir de $5.463 millones entre 13 gerentes, lo que también promedia una remuneración anual por ejecutivo de $420 millones.
Deuda de transparencia
Al ser consultadas de manera aleatoria 15 empresas por los resultados, la mitad de ellas presentó salvedades que no aparecen informadas en la memoria, ni en sus estados de resultados. Por ejemplo, una de ellas describía a siete ejecutivos como principales, los que se repartían una cifra global que salía de los cánones normales. Lo cierto es que ese monto se distribuía entre más de 100 personas.
Otro ejemplo: Entre las 40 sociedades analizadas la información sobre el número de ejecutivos de al menos 10 compañías: Entel (111), Oro Blanco (105), SQM (105), Concha y Toro (196), Aguas Andinas (65), Embotelladora Andina (64), Sonda (48), Itaú Corpbanca (283), Ripley (469) y Colbún (76) se ve distorsionada por una cifra muy alta de gerentes que informan (destacadas en gris en la tabla).
Estas disconformidades generan el reclamo de especialistas. El decano de Economía de la UDP, Fernando Le Fort, no cree que sea adecuado que las sociedades abiertas deban informar con total transparencia las remuneraciones de cada ejecutivo, al estilo de Estados Unidos, pues "tiene sus costos en el mercado laboral y puede generar distorsiones". Sin embargo, advierte que en las memorias, no está claro por qué algunas empresas agrupan de forma distinta a sus ejecutivos y sus pagos, ni cuánto corresponde a renta variable, a bonos y a sueldos fijos. "En el listado se puede incorporar un número muy grande de ejecutivos y ocultar que de 100, los 6 principales ganan muchísimo, mientras que los demás ganan menos. Se presta a confusiones", alerta.
Una opinión similar plantea Javier Pinto de la UAndes, quien señala que sería mejor transparentar la información, pero a quienes tienen interés en ella, como los accionistas minoritarios.
Matías Zegers, del Centro de Gobierno Corporativo de la UC, tiene una posición discrepante. Considera que la norma actual está en la línea de la información que el mercado requiere, puesto que no existe un problema donde los ejecutivos sean al mismo tiempo controladores de la empresa, de lo que se desprende que los accionistas requieran saber las remuneraciones de sus ejecutivos (principio "say on pay" aplicado en países como EE.UU.). "Además, cada empresa tiene una realidad diferente, por lo que puede plantear que sus ejecutivos principales sean muchos más que otras", advierte.
Recuadro :
Se puede incorporar un número muy grande de ejecutivos y ocultar que de 100, los 6 principales ganan muchísimo". Fernando Le Fort, decano de Economía de la UDP.
Lo que dice la normativa
La Norma de Carácter General (NCG) N°30, sección II, letra C, número 5 "Remuneraciones" de la Superintendencia de Valores obliga a las sociedades inscritas en el Registro de Valores a informar en su memoria anual las remuneraciones de sus ejecutivos. La disposición señala: "De acuerdo al artículo 33° de la Ley N° 18.046 deberá señalarse toda remuneración percibida por cada director o administrador en el ejercicio (...) La presentación deberá realizarse en forma comparativa y en detalle, de tal forma que pueda identificarse claramente para cada director o administrador, el monto y origen de las remuneraciones percibidas (...)". Pero en su letra d), la norma establece que "se deberá informar, de forma global, la remuneración total percibida por los gerentes y ejecutivos principales".
