Diario Pulso

Jose Luis Cea 158x158

Mañana jueves Clapes UC invitó a un selecto grupo de intelectuales proveniente de distintos sectores para conversar sobre "Orden Público Económico y Nueva Constitución", en un encuentro que será inaugurado por el ministro del Interior Jorge Burgos.

Entre los oradores estará el conocido abogado constitucionalista José Luis Cea de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica, quien critica lo extenso del proceso constitucional fijado por el Gobierno.

¿Cómo ve usted este debate constitucional?

Creo que hay una gran incertidumbre respecto de los temas, porque no están perfectamente definidos cuáles son ni con qué alcance van a ser articulados, no hay definiciones suficientes ni en relación al método de aprobación y menos en relación al contenido sustantivo de la nueva Constitución.

¿Respecto de los temas económicos de este debate existe igual incógnita?

¿Qué va a pasar con la propiedad, la libertad para adquirir el dominio, la iniciativa empresarial, el Estado prioritario o subsidiario, la regulación de los derechos de carácter económico? Es poquísimo lo que dice el programa de gobierno. Y tampoco se ve en la oposición una mayor precisión.

¿Cómo influye una Constitución en un mayor o menor crecimiento?

Las constituciones las hacen los seres humanos después, sobre todo, de grandes conflictos en busca de paz, justicia y libertad. Se establece como un acto masivo de contrato social, político y económico para organizar su futuro. Después se produce el proceso inverso, y es la Constitución la que comienza a influir en la vida de la gente, a modelar su conducta a través de sus disposiciones, por ende, cambiar una Constitución de la noche a la mañana es imposible porque queda como un país huérfano.

¿Cuál de todos los principios económicos contemplados en la Constitución actual usted conservaría en una nueva carta?

La Constitución tiene un orden público económico que es un concepto genérico, es decir que abarca muchas disposiciones, de manera que es muy difícil aislar de ese sistema tan sólo una disposición. Por ejemplo, la propiedad, si no está asociada con la libertad para adquirir el dominio, con la prohibición de expropiar sin pagar indemnización, con la explotación que se puede realizar para generar riqueza a través de la libre iniciativa, no vale nada. El orden público económico es un conjunto de 10 ó 15 disposiciones, todas las cuales juegan un rol muy importante en producir un resultado como es el desarrollo económico del país.

¿Qué otros tipos de Estado se pueden definir en una Constitución considerando que tenemos uno subsidiario en Chile?

Clásicamente el Estado fue prioritario. En Chile, entre 1925 a 1973 tuvimos un Estado prioritario, con una expansión inmensa de la burocracia, la incorporación de bienes y servicios estatizados, de bienes de producción obtenidos a través de las expropiaciones, nacionalizaciones, usurpación de tierra o lo que fuera. En 1980 se reemplazó ese concepto por el de subsidariedad estatal, que significa que la sociedad civil asume la satisfacción de muchos bienes a través de la prestación de servicios como la educación, salud, trabajo, seguridad social, construcción de obras públicas, viviendas, concesiones, y eso a muchos les parece inconveniente hoy día.

¿No hay un modelo entremedio de ambos?

Por supuesto que pueden haber fórmulas intermedias como el Estado unitario, liberal, neoliberal, socialdemócrata, pero son matices porque la matriz en el mundo entero se divide en dos modelos o esquemas fundamentales: prioritario y subsidiario. Percibo el deseo de volver al Estado prioritario, aunque no lo quieren llamar así, sino que le dicen Estado social.

¿Cree que se deba tocar la autonomía del Banco Central (BC)?

Espero que no, porque el Banco Central es una de las instituciones que ha funcionado con mayor éxito y ha sido reconocido por todos. Ahí no descarto que exista algún grado de peligro y lo he dicho en distintas oportunidades y escenarios. Si la institución ha funcionado bien, ¿por qué la va a cambiar?

Pero cada tanto se ha discutido sobre el rol del BC: si solamente debe ver inflación o también ver crecimiento, como la FED en EEUU que también vela por el empleo.

No es el rol de la política monetaria realizar lo que debe hacer la política fiscal. La política monetaria tiene que cautelar variables económicas decisivas como controlar la inflación, la normalidad de los pagos internos y externos, la emisión de circular, etc., pero no es el protagonista ni el primer llamado a impulsar el desarrollo del país a través de políticas públicas directas, eso es propio de la política fiscal.

A propósito de esta gran incógnita, ¿el proceso constituyente que se determinó con el cronograma es muy largo?

La indeterminación subsiste plenamente, incluso después del cronograma que es de una amplitud inmensa, no es seguro o certero del cual podríamos decir que confiere tranquilidad a todos los que quedamos preocupados por el proceso constituyente.

¿Cuánto es un tiempo prudente para estar hablando de un cambio en la Constitución, porque usted decía que no se hace de la noche a la mañana?

No le puedo responder esa pregunta, depende de un millón de variables incontrolables. Con este tipo de procesos no se puede jugar, eso sí que no, porque son sumamente aleatorios, muy peligrosos, porque se abre una caja de Pandora que tal vez sea imposible cerrarla después. Hay que ir con mucha prudencia, cautelosamente examinando paso a paso.

¿Y en el caso de Chile?

Dicen que tomaría hasta el pronunciamiento del segundo Congreso nacional elegido en diciembre de 2017. Creo que es muy largo, el país puede entrar en un clima de gran incertidumbre y eso va a afectar el aparato productivo, el funcionamiento de la economía.

¿O sea usted habría preferido que se resolviera en este mandato?

Soy partidario de discutirlo todo, pero no estoy de acuerdo en entrar en un proceso constituyente que generalmente ha sido un fracaso y que ha dejado sumidos a los países en una profunda conmoción social.

Descargar