La Segunda

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El primer recuerdo que tengo de la palabra Nunciatura fue con ocasión del asilo que recibieron algunas personas en 1973. Luego, tendí a participar de aquella confusión de identificar la labor del Nuncio como idéntica a la de un diplomático, que, aunque noble, no parecía del tipo pastoral acostumbrado; si bien su contribución a la paz fue evidente para lograr la Mediación Papal con Argentina.

Desde una perspectiva histórica, es innegable la labor que los legados pontificios han realizado para establecer relaciones diplomáticas bilaterales de la Santa Sede con 180 países y como miembro de diversos organismos internacionales.

Desde una perspectiva jurídico canónica, la misión de los nuncios aparece clara y relevante: representan de modo estable al Papa ante las diversas diócesis, arquidiócesis, vicariatos apostólicos y ante las autoridades públicas de los países o territorios u organismos donde se les envían. La estabilidad para realizar su misión es tal que no pueden abandonar sus misiones en medio de conflictos.

A nivel pastoral, el Nuncio en Chile se preocupa entonces de manifestar la cercanía espiritual del Papa en los lugares que recorre al ser invitado: parroquias, capillas, comedores, colegios, universidades, etc. Así puede conocer la realidad del país y hacerla presente a la Santa Sede.

Ello no corresponde a una labor de "informante" sino de facilitador de la situación que se vive en un determinado país.

¿Por qué se supone que los eventuales informes acerca de sacerdotes que residen en Santiago tendrán como consecuencia sanciones y no felicitaciones? ¿Es qué acaso intuimos que lo dicho no representa la enseñanza actual de la Iglesia sobre ciertas materias?¿O pretendemos que exista una suerte de exención o inmunidad respecto de algunos sacerdotes en razón de su popularidad, compromiso o reconocimiento?

Se ha dicho que se trataría de denuncias, pero si el Nuncio hubiera recibido alguna, tendría que derivarla donde corresponde, le guste o no. Cabe preguntarse si sería distinta la solicitud de informes según si ello está dirigido a un nombramiento de obispo o la entrega de algún reconocimiento, porque para ello también se requieren informes. No es posible un doble estándar: el rol del Nuncio conlleva enviar informes y estar al tanto de lo que sucede en Chile como expresión de la cercanía de la Iglesia en todas partes del mundo.