El encuentro contó con la participación del Director Nacional del Servicio Jesuita a Migrantes, Miguel Yaksic, quien analizó, entre otros, algunas consideraciones para la nueva Ley de Migraciones chilena.
Analizar los principales desafíos de la migración en Chile fue el objetivo de una nueva versión del ciclo de conversaciones Derecho UC Abierto al Debate. La instancia contó con la participación principal de Miguel Yaksic, Director Nacional del Servicio Jesuita a Migrantes, y con los comentarios del profesor Derecho UC Milenko Bertrand-Galindo.
Yaksic comenzó su intervención entregando una radiografía de la situación migratoria en Chile, asegurando que el país no está viviendo una ola migratoria. "No estamos colapsado. Tenemos cifras que están por debajo del mundo. Andamos como en el 2,8%. No tenemos un número de migrantes en Chile, pero creemos que deben de andar cercad e los 550.000 personas más o menos". Asimismo aseguró que el 62% de los migrantes residen en Santiago y que la ciudad en la que más ha crecido la migración en términos relativos es Antofagasta.
A continuación, el invitado analizó las principales preguntas que se han planteado en torno a la discusión migratoria en Chile: ¿El migrante es un aporte o un problema? ¿Chile debe tener una frontera de puertas abiertas o cerradas hacia la migración?
Según su percepción los migrantes son un aporte, pero no debemos caer en la tentación de transformarlos en medios, olvidando que son fines en sí mismos. "Así como queremos liberalizar el mercado de las cosas, también liberalizamos el mercado de las personas. La oportunidad que se presenta con los migrantes es mano de obra barata, la oportunidad es bajar los salarios, arrendar piezas indignas, el hacinamiento".
En este sentido, explicó, la nueva Ley de Migraciones debe considerar la incondicionalidad de los derechos y el reconocimiento de un sistema que permita que los extranjeros busquen trabajo de forma regular, desvinculados del contrato, lo que permitirá disminuir la irregularidad estructural. "Un migrante regularizado va a ser un emprendedor, no va a depender del Estado y va a generar empleo. Si tú pones trabas torpes, como las actuales, crece la irregularidad estructural".
Proponemos, agregó, una ley con enfoque de derechos humanos. "El enfoque intercultural que proponemos quiere decir: ¿estoy dispuesto a cuestionar mis concepciones tradicionales acerca de la identidad de la nación, de la raza, para entrar en un diálogo nuevo con ese otro que es parte de mi vida?"
El encuentro finalizó con una nutrida ronda de preguntas en las que se trataron temas como convalidación de títulos de migrantes y la importancia de la integración cultural, y los comentarios del profesor Bertrand-Galindo quien aseguró que el enfoque de Derechos Humanos queda bastante menguado por el enfoque Economicista y el de Seguridad Social en la orgánica estatal y que "una política migratoria seria tiene que tener las tres consideraciones en equilibrio".
