El exalumno de la Facultad, radicado en China, se encuentra trabajando en el proyecto de implementación de Big Data para la Corte Suprema del país asiático.

Estandarizar y mejorar la aplicación de justicia es parte de los objetivos del proyecto de implementación de Big Data para la Corte Suprema Popular China en la que participa el exalumno de la Facultad Matías Aranguiz.

El abogado UC, egresado en 2009 de la Facultad, llegó al país asiático en el marco de sus estudios de magíster y doctorado en la Shanghai Jiao Tong University. En ese contexto, tuvo la posibilidad de participar como profesor visitante en el curso Artificial Intelligence and Global Risks en el MIT, Estados Unidos, y tras eso se le abrió la posibilidad de unirse al equipo que trabaja en la implementación de un nuevo sistema para el poder judicial chino.

El proyecto, asegura el mismo, busca implementar Big Data en las cortes para estandarizar y mejorar la aplicación de justicia. “China tiene hoy aproximadamente 121.000 jueces, lo cual genera grandes desafíos en la coordinación de trabajos, tiempos de respuesta, estandarización de calidad, generación de documentos o procedimientos”, explicó. En este contexto, “se determinó el Big Data como una herramienta fundamental para mejorar la toma de decisiones dentro de organizaciones. En el largo plazo, con una mayor penetración de estas herramientas, las instituciones van a pensar en clave tecnológica, empezarán a ver cómo resolver problemas desde distintos puntos de vista y esta nueva forma de pensar es uno de los efectos fundamentales del uso de la tecnología”.

Esta realidad, que muchos llaman la cuarta revolución industrial, aseguró el mismo, tarde o temprano tendrá un impacto en el ámbito legal chileno y para ello, los abogados deberán familiarizarse con las diferentes opciones que existen en sus áreas. Para sacar el mejor provecho, indica, será necesario evaluar qué posibilidades reales tiene la tecnología de mejorar un problema en particular, determinar su aporte y entender también los riesgos asociados a su incorporación.

El abogado UC, quien también se ha desempeñado laboralmente en el estudio Philippi Prietocarrizosa Ferrero DU & Uría y en el Ministerio de Justicia, asegura que para hacer frente a este desafío en necesario integrar en el día a día estas tecnologías seguras, para familiarizarnos con ellas y sacar las mayores ventajas.

En este nuevo contexto, agrega, los abogados, además de tener una sólida formación jurídica, deben tener la capacidad de dialogar con otros profesionales, entender otras realidades, saber hablar y entender los lenguajes no jurídicos, en particular de la economía y tecnología, ya que les permite pensar en otras sintonías y, por tanto, lograr mejores resultados.