El Mercurio
Oposición cuestionó la propuesta del mandatario y aseguró que 'es más de lo mismo' en relación a la actual Carta Magna y que 'no se hace cargo de las demandas ciudadanas'.
Fu durante la semana que el Presidente Sebastián Piñera envió a sus ministros un decálogo con contenidos que consideró claves para una Constitución, donde destacó algunos principios ya presentes en la actual Constitución, así como también presentó novedades como el reconocimiento a los pueblos indígenas, una sociedad inclusiva y diversa, mejoras en las políticas medioambientales, lo que abrió el debate entre abogados constitucionalistas. Esto, en línea con la idea del Gobierno de que si bien no se mostrarán a favor del Rechazo o del Apruebo, lo importante es comenzar a marcar posturas sobre el contenido constitucional.
'Básicamente está defendiendo el texto actual, el Presidente está dando a conocer que su sector o él deberían defender el texto vigente', planteó el constitucionalista DC Tomás Jordán. sin embargo, consideró que existen algunas novedades, como por ejemplo que 'se le da relevancia a la idea del Estado solidario y parece abandonar la idea de subsidiariedad propiamente tal' y que se recogen temas actuales como la igualdad entre hombres y mujeres y los pueblos indígenas.
Por su parte, Catalina Salem, constitucionalista de la Universidad Católica, dijo que 'varios de los conceptos que da el Presidente ya están en la Constitución y en realidad debieran estar en cualquier Constitución, como por ejemplo la separación de poderes del Estado, el derecho a la vida o la libertad de expresión. Es valorable que se rescaten'.
Con un tono más crítico y a diferencia de lo anterior, Gabriel Osorio, abogado constitucionalista y militante socialista, aseguró que 'al Presidente le gusta mucho la Constitución de 1980, porque sus ideas son el fiel reflejo de lo que tenemos actualmente. No hay nada nuevo'.
En una vereda opuesta, el constitucionalista Arturo Fermandois destacó el documento puesto que cree que 'es un excelente impulso para que el debate constitucional entre luego al fondo, a los contenidos. Algunos impulsores de una nueva constitución parecen rehuir este plano y permanecen en la consigna. Así, el plebiscito seguirá muy desinformado'.
Críticas de la oposición
La oposición, en tanto, cuestionó el documento elaborado por el Mandatario. Para Heraldo Muñoz, timonel del PPD, 'los puntos esenciales de Piñera para una nueva Constitución son más de lo mismo, no se diferencia sustancialmente de la actual Constitución'.
Por su parte, el presidente del PS, Álvaro Elizalde, planteó que el 'decálogo del Presidente es ‘simple refrito' de disposiciones de la actual Constitución, que no se hace cargo de demandas ciudadanas, como los derechos sociales'.
Por último, el timonel de la Democracia Cristiana, Fuad Chahin, dijo que 'la señal política que da el Gobierno es que hoy día está por el Apruebo, tanto así que quiere influir en el contenido de la discusión', pero también destacó que en la participación ciudadana, el principio del desarrollo sustentable y el Estado solidario, 'tenemos coincidencias'.
'Básicamente está defendiendo el texto actual, el Presidente está dando a conocer que su sector o él deberían defender el texto vigente', planteó el constitucionalista DC Tomás Jordán. sin embargo, consideró que existen algunas novedades, como por ejemplo que 'se le da relevancia a la idea del Estado solidario y parece abandonar la idea de subsidiariedad propiamente tal' y que se recogen temas actuales como la igualdad entre hombres y mujeres y los pueblos indígenas.
Por su parte, Catalina Salem, constitucionalista de la Universidad Católica, dijo que 'varios de los conceptos que da el Presidente ya están en la Constitución y en realidad debieran estar en cualquier Constitución, como por ejemplo la separación de poderes del Estado, el derecho a la vida o la libertad de expresión. Es valorable que se rescaten'.
Con un tono más crítico y a diferencia de lo anterior, Gabriel Osorio, abogado constitucionalista y militante socialista, aseguró que 'al Presidente le gusta mucho la Constitución de 1980, porque sus ideas son el fiel reflejo de lo que tenemos actualmente. No hay nada nuevo'.
En una vereda opuesta, el constitucionalista Arturo Fermandois destacó el documento puesto que cree que 'es un excelente impulso para que el debate constitucional entre luego al fondo, a los contenidos. Algunos impulsores de una nueva constitución parecen rehuir este plano y permanecen en la consigna. Así, el plebiscito seguirá muy desinformado'.
Críticas de la oposición
La oposición, en tanto, cuestionó el documento elaborado por el Mandatario. Para Heraldo Muñoz, timonel del PPD, 'los puntos esenciales de Piñera para una nueva Constitución son más de lo mismo, no se diferencia sustancialmente de la actual Constitución'.
Por su parte, el presidente del PS, Álvaro Elizalde, planteó que el 'decálogo del Presidente es ‘simple refrito' de disposiciones de la actual Constitución, que no se hace cargo de demandas ciudadanas, como los derechos sociales'.
Por último, el timonel de la Democracia Cristiana, Fuad Chahin, dijo que 'la señal política que da el Gobierno es que hoy día está por el Apruebo, tanto así que quiere influir en el contenido de la discusión', pero también destacó que en la participación ciudadana, el principio del desarrollo sustentable y el Estado solidario, 'tenemos coincidencias'.
