María Soledad Cisternas venció todo impedimento y a pesar de su ceguera total, es hoy la nueva Presidenta de este Comité, siendo reconocida por la Cámara de Diputados tras su elección.

María Soledad Cisternas, exalumna Derecho UC, fue elegida Presidenta del Comité de expertos de Naciones Unidas sobre los derechos de las personas con discapacidad. La votación fue realizada entre 18 especialistas provenientes de distintas regiones del mundo. Soledad obtuvo el 80% de aprobación, convirtiéndose así en la primera mujer y en la primera persona de origen latinoamericano en presidir dicho organismo.

Soledad Cisternas ONU interior2"Esta es una realización profesional completa. Hacer un aporte al mundo en que vivimos en pro de la humanidad, a través de la disciplina del derecho, en una esfera creativa y fascinante, desde los derechos humanos universales, indivisibles e interdependientes, es algo muy gratificante", asegura. Además de este nombramiento y el orgullo que siente, la Cámara Baja la condecoró con la Medalla Cámara de Diputados, que le fue otorgada por el Presidente de la Corporación, Edmundo Eluchans.

María Soledad, pese a presentar ceguera parcial durante su adolescencia, ingresó a estudiar derecho en la UC. "Fue mi vocación desde siempre, teniendo como base el principio de la justicia. Mis opciones eran: derecho, derecho y derecho", afirmando que optó por la UC "por su prestigio y excelencia académica en vínculo a un proceso de formación integral".

Esa vocación se fue encausando hacia el área de los derechos humanos. "La sólida formación universitaria, me hizo desarrollar especialmente el 'criterio jurídico' y el sentido del derecho público, particularmente en el derecho constitucional y el derecho internacional público. Esta combinación resultó muy potente en mi vocación profesional".

Soledad Cisternas ONU interiorLuego de rendir su examen de grado, María Soledad perdió completamente la visión. "Aunque fue un duro golpe, jamás puse en duda seguir adelante y continuar hasta el final". En esas condiciones obtuvo distinción máxima y posteriormente realizó su práctica profesional. "Pienso que era tan fuerte mi gusto por la disciplina jurídica, por los desafíos que enfrentaba este estudio de alta exigencia y los retos cotidianos de la litigación, sumado a mi gran deseo de crear, servir y también de ser una profesional independiente, que no tuve ni un sólo minuto de dudas en mi camino".

María Soledad afirma que es feliz, que cada esfuerzo valió la pena y que su vocación por el derecho la impulsó a seguir esta carrera enfocada en los derechos humanos.

En cuanto a la enseñanza del derecho en la UC, comenta que "mi deseo es que podamos vincular este quehacer dinámico internacional, en la formación y perfeccionamiento de los estudiantes como futuros profesionales integrales del siglo XXI".